El arma más poderosa del mundo

Muchos creerían que el arma más poderosa del mundo es una atómica, aquella que tiene increíbles reacciones nucleares en cadena y que terminan su mortífero show con un hermoso y espeluznante hongo radioactivo, pero no, esta arma de la que les voy a hablar tiene la particularidad de no solo destruir, también puede calmar, engañar, excitar, alimentar e incluso ganar likes.

Las tetas como llamaremos a estas cotidianas armas no tienen el reconocimiento que merecen, generalmente las vemos como el complemento estético de una mujer, "mientras más grandes mejor" y es que la mayoría de las veces no importa su procedencia o su genero, los amantes inexpertos de esta particular y mamaria fuente de sonrisas caerán redondos ante los encantos de esos melones bamboleantes sin hacer mucho caso a lo que para ellos parece ser secundario, como el físico, la inteligencia, la calidad e incluso el sexo de quien las porta, lo realmente importante pasará a segundo plano causando revuelo para quienes tenemos la facultad de ver más allá de un par de chichis.

La recurrente farsa. 

Para darnos una idea de lo poderosas que son las tetas viajemos en el tiempo al mundo de los recuerdos del internet para hacer evidente lo "necesarias" que son las chichis en el mundo, desde famosas queriendo brillar haciendo más grande la talla de su brasier hasta bromas en cam roulette donde las ansias de ver tetas ha hecho que más de uno caiga en las garras de hombres burlones en sostén.

¿Qué tan positivo es tener unas "pinches shishotas"?

Todo depende del portador, es como tener un maletín lleno de dinero, cuanto te dure, dónde lo gastes y cómo lo inviertas es lo que definirá en que posición estás porque no es lo mismos cantidad que calidad y esto también se aplica aquí y no es que esté en contra de los implantes pero honestamente la mayoría de los trabajos plásticos en esta área son malísimos y a veces innecesarios, incluso creo que si la portadora no tiene algo más que ofrecer en cuestión neuronal puede simplemente quitar mérito al talento (si es que se tiene) y se puede especular que sin las tetas fulanita no sería nada, sin embargo, si la susodicha no tiene mucho que ofrecer más allá del físico los implantes serían un buen salvavidas o en este caso "salvacarreras".

     

      

En conclusión:
Los implantes mamarios y el uso de las tetas para escalar de rango en cualquier asunto no está mal mientras se tenga la plena conciencia de que así es, no se vale después las quejas  como "solo me miran como un objeto" "nadie me toma en serio" y "nadie me mira a los ojos" porque no solo sería hacerse pendeja, básicamente sería ser una y aquellas que les guste jugar el juego de la popularidad y la seducción a base de ellas, recuerden, con un gran escote se lleva una gran responsabilidad ;)

Opinión.

Personalmente prefiero siempre lo natural y de un tamaño moderado porque padre tiempo no perdona y ver a la gravedad hacer lo suyo con la piel no siempre es un espectáculo con final feliz, esto se puede apreciar sobre todo en las películas porno donde se ve a alguna actriz mal operada, ese escalofriante tirón de piel que se mira en la posición de perrito entre el busto y la axila similar a llevar colgando una bolsa con agua puede bajar la calentura en lugar de encenderla

Y tu, ¿qué prefieres?